Gato Snowshoe

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El gato snowshoe de cabeza regordeta lleva «calcetines blancos». Esta raza es relativamente nueva y es el resultado del cruce entre un siamés y un gato americano de pelo corto. Este minino de carácter pacifico con cuerpo robusto es bastante ágil. Le gusta curiosear y buscar algún entretenimiento así que no pondrá reparos en divertirse contigo. Siempre que pueda te perseguirá por la casa o se aferrará un buen rato a sus juguetes teaser preferidos. Le encanta llamar la atención por lo que no te sorprenda que maulle incansablemente hasta que consiga que le hagas caso. No le gusta nada la soledad, es muy casero y convive muy bien con otras mascotas.

Origen: EEUU.
Peso: De 3 a 5 kg.
Carácter: Tranquilo y hogareño.
Color: Marrón y azul.
Pelaje: Corto.
Cabeza: Redondeada.
Orejas:Puntiagudas.
Ojos: Grandes y ovalados. Color azul intenso.

Cuidados

Esta raza de gatos suele gozar de buena salud. Debes tener en cuenta el cepillado periódico para evitar que trague bolas de pelo. Es recomendable que le controles la alimentación especialmente para que no tenga sobrepeso. A veces suelen ser un poco glotones y es buena idea que tenga un comedero automático y controles así la dieta de tu compañero gatuno. No olvides nunca las chequeos veterinarios habituales para estar al día de sus vacunaciones y desparasitaciones.

Historia

El gato snowshoe de patitas blancas es resultado de un cruce entre un siamés y un americano de pelo corto que tiene lugar en los años 60 en Filadelfia. La criadora de gatos siameses Dorothy Hinds-Dagherty obtiene crías con ese patrón de color difundiendo la raza del snowshoe. En los años 70 pierde popularidad pero de nuevo en los años 80 se pone de moda. Durante estos años algunos criadores intentan que sea reconocida como raza por las asociaciones de gatos más importantes y lo consiguen tanto en EEUU como en Europa.