Los gatos pueden tener distintos motivos para sacar el agua de su bebedero. Las explicaciones más habituales tienen que ver con el instinto y otras con costumbres. Incluso puede ser que simplemente estén aburridos o que les parezca que el agua no está suficientemente limpia. Sin embargo, puedes ayudarles con platos para el agua para gatos que satisfagan sus necesidades.
Fuentes para gatos
Si una cosa está clara con los gatos es que prefieren beber el agua en movimiento. Esto es normal si pensamos en cómo beberían el agua en libertad. Y por eso es normal verles bebiendo en los grifos de casa. Por lo que una fuente de agua es el complemento perfecto para que mantengan el instinto.
Se trata de un recipiente habitualmente elevado con una bomba que eleva el agua para que caiga en forma de cascada. Además de mover el agua, hace que esté más oxigenada, fresca y limpia. Se trata del sistema de agua más recomendable para todo tipo de gatos.
Bebederos automáticos
Otro de los sistemas que evita el agua estancada y proporciona siempre agua limpia son los dispositivos automáticos. Al contrario que ocurre con las fuentes, no tienen porqué tener un flujo constante de agua. Simplemente se aseguran de que siempre hay agua en el plato.
Superficies planas para el agua
Uno de los motivos por los que tu gato tira el agua del bebedero puede por falta de seguridad. Sin hay otros animales en la casa o lleva poco tiempo contigo, es posible que se sienta desprotegido al ir a beber. Y si encima el plato tiene bordes alto la cosa se complica al no poder vigilar y tomar agua al mismo tiempo. Para solucionarlo ponle un plato grande y plano con el que tenga una visión amplia.
Recipientes de acero inoxidable
Si descubres que tus gatos no toman agua porque el plato se ensucia con facilidad también puedes probar con bebederos de acero inoxidable. Este material además de mantener el agua fresca es más limpio. Ya que las bacterias proliferan mucho más lentamente que en el plástico u otros componentes habituales en platos para animales.