Antes de nada, que no cunda el pánico, sabemos que es un momento que puede ser muy estresante para tu gato, por lo que es importante que te lo tomes con calma y tranquilidad. Si ves que no puedes hacerlo solo, siempre puedes pedir ayuda en clínicas veterinarias, pero nuestra recomendación es trabajar para que el corte de uñas se convierta en un momento agradable que compartir con tu compañero.
¿Porqué es importante cortar las uñas a los gatos?
Arañar es un comportamiento innato de los gatos que tiene mucha utilidad para su desarrollo y en la manera en que se comunican con su entorno. Los gatos necesitan arañar para liberar estrés y estirar sus músculos, pero no solo eso, las marcas visuales y olfativas que dejan sirven para marcar su territorio y son un arma perfecta para la caza. Sin embargo, es cierto que en el caso de los gatos domésticos unas uñas muy largas pueden causar problemas en los muebles e incluso poner en riesgo nuestra integridad.
Lo primero que debemos decir es que, como hemos visto, las uñas son fundamentales para los gatos, por lo que en ningún caso debemos plantearnos extirparlas. Pero lo que sí podemos hacer es recortarle las uñas para mantenerlas en buen estado, así como poner a su disposición un árbol rascador en las que pueda limarlas él mismo.
Paso a paso para aprender a cortarle las uñas a un gato
Veamos cómo hacer para cortar las uñas del felino de manera respetuosa.
1. Tómate tu tiempo para que se deje coger y tocar las patas.
A muchos gatos no les gusta que les manipulen, por lo que lo primero que tenemos que hacer es conseguir que se acostumbre a que podamos cogerlo y tocarle las patas sin problema. Esto es mucho más sencillo cuando el gato es un cachorro, pero nunca es tarde. Poco a poco comienza a cogerle y acariciarle las patas mientras le premias, recuerda que es él el que marca los tiempos, si no quiere seguir tienes que dejarle marchar. Así con el paso de los días verás como logras poder manipularlo para hacer el corte de uñas.
2. Elige herramientas adecuadas.
Asegúrate de tener un cortauñas que corte bien y que puedas manejar cómodamente, de lo contrario solo conseguirás que el momento sea aún más complicado.
3. Comienza a cortar poco a poco.
Sujeta la pata con una mano y con la otra el cortauñas, ve haciendo caricias y con tranquilidad presiona la almohadilla para que la uña salga. Entonces corta la punta con mucho cuidado. Recuerda que las uñas tienen vasos sanguíneos en su interior, por lo que siempre tenemos que cortar solo las puntas.
4. No te olvides de los premios.
Usa tu voz para relajar a tu gato y cada vez que cortes una uña asegúrate de premiarle con algún snack que le guste mucho. Así entenderá que cortarse las uñas no es algo malo.
5. Comprueba regularmente el estado de las uñas.
De esta manera podrás adelantarte a que se le rompan o a que estén demasiado largas.