Descubre el carácter increíble del gato siamés

Gato siamés tumbado
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¿Sabías que existe una raza conocida como “el perro de los gatos”? A continuación, te contamos todo sobre el carácter del gato siamés, que debe su nombre a que procede del reino de Siam, la actual Tailandia, donde se creía que atraían la buena suerte.

Un gato dependiente y cariñoso

Si por algo se distinguen los felinos es por ser independientes, incluso ariscos para determinadas personas. Nada de esto aplica al carácter del gato siamés: este minino, de tamaño medio y cuerpo estilizado, elegirá a una persona de la casa como su “favorito” y a partir de ahí le seguirá siempre para pedirle mimos.

El siamés es un gato casero y hablador, con múltiples registros de maullido que comunican lo que quieren en cada momento. Es una mascota muy fácil de adiestrar, que incluso tolera el arnés y permite ser paseado.

Eso sí, si estás pensando compartir tu vida con este felino, debes saber que son animales muy activos, que necesitan su dosis de ejercicio y juego diarias; si le faltan, puede desarrollar problemas psicológicos.

Se adaptan muy bien a la vida con otros gatos, e incluso con perros, si conviven juntos desde que son pequeños. En definitiva, entre todas las razas de gatos que existen, son una de las mejores opciones.

Gato siamés en una terraza de casa

¿Qué tipos de gato siamés existen?

Históricamente, se han distinguido dos razas de siameses: el gato siamés tradicional o thai  y el gato siamés moderno. Se distinguen, fundamentalmente, por la esbeltez: el siamés moderno, fruto de años de evolución y cruces sucesivos, es más estilizado y, en consecuencia, más ágil, con una cola larga de látigo.

Además, es un poquito más grande y con unos patrones de color más definidos, fruto de los cruces controlados por los criadores durante generaciones.

Por su parte, el siamés thai, el originario, es más pequeño y compacto, con la cabeza más redonda y el hocico más chato, así como unas orejas sustancialmente más pequeñas que en la línea moderna.

Colores del gato siamés

El siamés es muy fácil de distinguir, ya que tiene un pelaje de color beige clarito, con patas, hocico y parte final de la cola en color más oscuro. En función del color de los puntos de contraste, se distinguen 4 tipos:

  • Seal point: de color marrón negruzco.
  • Chocolate point: marrón chocolate.
  • Blue point: de color grisáceo, es una variación del seal point.
  • Lilac point: con puntos lilas, deriva del chocolate point.

Además, es posible encontrar siameses red point, o con puntos anaranjados, así como siameses blancos, cuyo pelaje es totalmente níveo, sin puntos de contraste.

Todos ellos poseen los ojos característicos de la raza, de un azul intenso, y una esperanza de vida de entre 12 y 16 años, en función de los cuidados que reciba y la genética que tenga, aunque algunos ejemplares pueden llegar incluso a los 20 años.

Mirada de un gato siamés

Cuidados del gato siamés

No se trata de una raza de gatos que requiera especiales cuidados, más allá de una correcta alimentación carnívora alta en proteínas, preferiblemente a base de pienso seco de calidad como Acana para gatos.

Sin embargo, lo que sí necesitan los gatos siameses es un alto nivel de actividad y de juegos: son gatos extremadamente ágiles y a los que les gustan las alturas, por lo que disfrutarán enormemente de una torre de juegos o un árbol rascador. Pero, además, son muy sociables, por lo que pueden llevarte una pelota o juguete cuando quieren jugar, igual que lo haría un perro.

Por lo que respecta a la higiene, como todos los gatos son animales muy limpios, pero es necesario cepillar muy bien su pelo cada 10 o 15 días, no sólo para eliminar el pelo muerto, sino porque ellos lo disfrutan como un momento de relax y socialización con su humano.

Estrabismo y otras dolencias

El gato siamés disfruta normalmente de buena salud, pero como cualquier animal tiene algunas patologías asociadas a la raza, que se dan con cierta asiduidad.

Entre ellas destaca el estrabismo, tan normal que hasta hace muy los gatos con esta condición se aceptaban sin problemas en los concursos de belleza. Actualmente, y para intentar que las próximas generaciones nazcan libres del estrabismo, ya no es así.

Además, los siguientes trastornos son más o menos comunes:

  • Tumores mamarios: aparecen en la vejez y suelen tener carácter maligno.
  • Bronquitis crónica y otros problemas respiratorios.
  • Sordera congénita: puede afectar a uno solo o a los dos oídos, tanto de forma parcial como completa.
  • Piedras en la vejiga.

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