El gato montés no es doméstico. Es un felino salvaje que con el tiempo podría estar en peligro de extinción. Es muy similar al gato común europeo pero tiene la cola más ancha y es más robusto. Este gato es sobre todo un cazador nocturno. Es territorial y solitario. Existen ejemplares que se han adaptado a vivir con personas y han acabado siendo domesticados. Esto ha ocurrido siempre en lugares con espacios al aire libre como pueden ser granjas o residencias en el campo donde se les ha proporcionado comida y a la vez han podido disfrutar de sus aventuras y expediciones felinas sin límites en plena naturaleza.
